Entrega de la Regla por Colantonio 1445
San Francisco de Asís (1182-1226), fundador de las Órdenes Franciscanas, entrega la regla, pintura de Niccolo Antonio Colantonio (1445). Museo Nacional de Capodimonte. Nápoles, Italia.
Colantonio trabajó en Nápoles entre 1440 y 1460, bajo el reinado de René de Anjou y Alfonso V de Aragón, ambos grandes admiradores del arte flamenco. La diversidad de estas dos influencias —el naturalismo del norte y la precisión ibérica— se observa en los dos paneles que Colantonio realizó para la iglesia franciscana de San Lorenzo Maggiore. Estas obras fueron pintadas en distintos momentos y más tarde completadas por Antonello da Messina con pequeños paneles laterales que representan beatos franciscanos. El tema general del retablo era la exaltación del pensamiento franciscano, del cual San Jerónimo, según las teorías de San Bernardino de Siena, había sido uno de los principales inspiradores.
En esta escena, sobre un fondo dorado resplandeciente, un esbelto San Francisco ocupa el centro, entregando la Regla franciscana a sus hermanos, que se arrodillan con reverencia a su alrededor. A la izquierda, Fra Leone recibe el libro; a la derecha, un grupo de mujeres incluye a Santa Clara de Asís. En la parte superior, dos aves simétricas vuelan sosteniendo cartelas, símbolo de la aprobación divina de la Regla y de la armonía espiritual de la creación.
La obra refleja el conocimiento de Colantonio de las novedades estilísticas introducidas desde Aragón en la corte de Alfonso. Esto se percibe en el pavimento empinado y casi vertical, en los rasgos definidos de las figuras, en las aureolas caladas y en los pliegues rígidos y geométricos de los vestidos. Estos detalles muestran un momento de transición en la pintura napolitana, donde la elegancia del gótico tardío se encuentra con la estructura racional del primer Renacimiento, capturando la ferviente espiritualidad y la vitalidad intelectual del mundo franciscano. El otro panel, que representa a San Jerónimo en su estudio, a pesar de ser uno o dos años anterior, está aún más influenciado por la pintura holandesa temprana que gozaba de favor en la corte angevine, con pintores como Barthélemy d'Eyck.
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