Santos Inocentes
Cada 28 de diciembre la Iglesia Católica celebra la fiesta de los Santos Inocentes, los niños que murieron por Cristo, el Mesías de la humanidad, asesinados por órdenes del rey Herodes.
Para asegurar que el niño no sobreviva, Herodes mandó a asesinar a todos los menores de dos años que vivían en Belén y sus alrededores. Aquel fue el primer derramamiento de sangre desatado a causa de Jesucristo: un crimen horrendo producto de la soberbia y la ambición desmedidas, un atentado cuyas víctimas carecían de mancha o reproche.
Por eso, la muerte de aquellos seres inocentes se convirtió en anticipo de la muerte del Salvador, víctima inocente por excelencia, porque ni el pecado original lo pudo alcanzar.
Comments
Post a Comment