San Francisco
San Francisco de Asís vivió una espiritualidad pascual, es decir, reprodujo en sí las fases del misterio de su Señor. Su vida estuvo marcada por la oración, el despojarse de sí mismo y la preparación constante para la muerte.
Oración
- Se retiraba a orar en iglesias abandonadas en lugares remotos y desiertos
- Se sentaba, comía o bebía siempre inmerso en oración
- Se transformó en un canal de la gracia y del amor de Dios
Despojarse de sí mismo
- Se despojó de muchas cosas, exterior e interiormente
- Se despojó de su voluntad a través de la obediencia
- Se despojó de los oficios que se le encomendaban
- Se despojó de la envidia y el orgullo
- Se despojó del narcisismo y del deseo de demostrar a los demás lo buenos que era
Preparación para la muerte
- Se preparó constantemente y cotidianamente para la muerte
- Enseñanzas
- Educó a sus hermanos en esta mentalidad
- Su lenguaje estaba tomado del lenguaje pascual de la Biblia y de la Liturgia
La Pascua de Francisco nos recuerda que cada día es una oportunidad para empezar de nuevo
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